la constitución española

Seré todo lo especial que me dé la gana, y si los opusianos anónimamente me mandan la constitución española quiere decir que os molesta lo que digo porque es la pura verdad. Hoy en día con la sociedad que tenemos, la mezcla en todos los trabajos de hombres y mujeres, los medios de comunicación, la caída de tantos tabús impensables hace sólo 40 años ¿quién se puede creer el cuento chino de que la educación separada niños - niñas beneficia en algo? no tiene sentido.
Estáis amarrados al pasado porque en este tema os conviene amarraros a una situación pasada. El fundador echaba pestes de la profesión educativa, dentro del opus si eres maestra o profesora eres de "lo bajo de la escala". Incluso aunque lleves un sueldo al centro que la directora no lleva porque se dedica a "labores internas". Lo he vivido.

Y si habéis puesto colegios, una red que no tiene igual en extensión, es por la necesidad de pescar.
No sé en qué artículo de la constitución se defiende la necesidad de la verdad, y los españoles tienen todo el derecho a saber aquellas cosas que el Opus oculta. Sin verdad no hay libertad.
Aparte podríamos hablar de lo tontas que se ponen las niñas cuando no se educan con muchachos y lo más brutos todavía que se vuelven los chicos cuando no se mezclan naturalmente con niñas.

Esto lo he hablado con alguien que ha sido "madre de colegio" y yo misma lo he comprobado en mi vida absolutamente anormal que llevaba de no relacionarme más que con mujeres por ser numeraria. Es un absurdo existencial que hoy por hoy sólo tiene una justificación, separar para echar las redes con más facilidad.
¡Anda que el opus dei trayendo a colación la constitución de 1978! cuando lo único que cuenta para ellos son las directrices de lo alto... Presumo que la constitución española prohíbe las sociedades secretas, las mafias y las sectas. Que evidentemente no van por ahí diciendo: "¡atención soy una mafia!" Por desgracia hay que sufrir las consecuencias para poder denunciar. Si Dios te da vida y salud, que ya os ocupáis también de eso, de que no queden testigos molestos.

Y también me quejo de que los poderes públicos en este país no están cumpliendo su misión de entrar bien adentro de esos colegios, a ver que se hace, cómo es posible que se obligue a la gente a confesar, que se vigile quien lo hace y quien no, que los curas utilicen los confesonarios de los colegios para recoger información que llevan a la jerarquía opusiana, que los directores "internos" del Opus son los que verdaderamente dirigen a quién se contrata como profesor y a quién se echa. Y que se utilicen las tutorías para meterse en las conciencias de los alumnos y suscitar adhesiones incondicionales y ciegas a una secta. De eso me quejo y me seguiré quejando porque es evidente que nadie está moviendo un dedo para que deje de pasar. Además de que nadie se imagina el poderío de saber por el confesonario qué piensa y cómo respira toda una familia, las relaciones entre ellos: la hija, la madre, la abuela... Confesonarios y curas para mejor manipular. No creo que ninguna otra secta en el mundo se atreva a tanto.

Además de que no trae cuenta a un país estos nidos de elitismo y racismo que destila el opus dei en sus colegios. Así que animo a los poderes públicos a cumplir con su obligación en vez de hacerse tanta foto y tanta sonrisita... queremos que se actúe.
Y a los obispos también, porque es evidente que es de la incumbencia de la iglesia católica el abuso del sacramento de la confesión que se hace en el opus. Ya va siendo hora de meterse en ese cenagal.



Ana Azanza