Porque se dan prisa en beatificar

Sí, la cabeza de todo el invento está en Roma, y leyendo el artículo que a dicha cabeza le han publicado en el ABC, y conociendo a esa persona, parece increíble que alguien con tan poco talento y experiencia vital pueda estar al frente de una máquina de destrozar vidas y hacer dinero como el Opus Dei. Echeverría llegó a Roma con 17 años dicen, no recuerdo en qué fecha, años 50. Y no ha vuelto a salir de la sede central. Desde entonces hasta hoy en la misma casa, al lado del fundador y del sucesor del fundador para convertirse a su vez en el segundo sucesor de Escrivá ¿Desde cuándo sabía Echeverría que algún día sería el "Padre"? sucedió en 1994, lo vivimos intensamente, como todo lo que tiene que ver con la "cabeza". Pero estoy segura de que eso estaba ya preparado, quizá hasta por el propio fundador.

 Viviendo en ese clima de adulación, se ve que supo medrar y encontrar su puesto. No ha hecho otra cosa en la vida, ni siquiera ha cambiado de domicilio, no ha conocido más que las cuatro paredes de Villa Tevere y el fanatismo que allí se respira y que debe de ser superior a todo lo que nos podamos imaginar.
No me extraña que alabe a Juan Pablo II, fue un don este papa, dice, y lo fue en especial para ellos que lo acompañaron en su camino hasta el "trono de Pedro", y que como Papa les dio todo lo que antes Pablo VI les había negado
Son los principales responsables del retroceso que hemos vivido en la mentalidad de la iglesia desde el infausto 1978.
Juan Pablo II fue elegido en la quinta votación del segundo cónclave de 1978. Sorpresivamente adelantó a Benelli, que era el más votado en las cuatro veces anteriores. Y fue precisamente König, el cardenal de Viena, que ya les había dado por entonces una iglesia al Opus Dei en el centro de esa ciudad, el que animó a que votaran al desconocido polaco como compromiso entre los dos polos en que se dividían los cardenales, los rancios de Siri y los más renovadores dentro de lo que un cardenal puede serlo, encabezados por Benelli.

Juan Pablo II fue informado de todo lo que su predecesor quería hacer para limpiar la iglesia católica de banqueros corruptos, mafiosos y demás gente de malvivir. Supo de las logias masónicas infiltradas en el Vaticano en la persona de  cardenales, obispos, y otros altos dignatarios de la Iglesia. Pertenecer a la masonería era motivo de excomunión. Investigó los sucios negocios de Calvi y Marcinkus, incluidas las cuentas en paraísos fiscales y hasta un Banco en las Bahamas que el cardenal presidía. 
Juan Pablo II  sabía que Luciani quería destituir al cardenal Cody de Chicago, porque tenía mujer y negocios,  un escándalo. Cody  se llevaba bien con los Opus Dei.  Juan Pablo II estuvo mejor situado que nadie para hacer los cambios precisos, y no hizo absolutamente nada de lo que se esperaba de él.
Villot volvió a ser designado como Secretario de Estado; Cody conservo el control sobre Chicago; Marcinkus siguió manejando el banco del vaticano, al tiempo que encubría igual que antes las actividades delictivas, cada vez mas florecientes del banco Ambrosiano; Calvi seguía en libertad para dedicarse al saqueo masivo y al fraude a gran escala, actuando bajo la cobertura del Banco del vaticano; El cardenal Baggio no fue trasladado a Venecia; El corrompido Poletti permaneció como cardenal vicario de Roma.

Toleró la corrupción que había y abrió las puertas de par en par al Opus Dei, dos tazas del mismo caldo que no querías.
Más adelante Juan Pablo II recibió quejas de actuaciones del fundador de Comunión y Liberación en Milán. De los abusos a menores también se le habló. Hizo caso omiso. No movió un dedo. Estaba al corriente de las quejas sobre el Opus Dei, tampoco las escuchó. Su entorno, del que el Opus Dei fue protagonista indiscutible con la figura de Navarro Valls y la infiltración de curas opusinos en la burocracia papal, supo recoger los gestos que Juan Pablo I había hecho para quitarle al papado ese carácter anticuado y majestuoso, con la silla gestatoria en medio de la multitud y tantas otras cosas que hacían del Papa un personaje del XIX a las puertas del año 2000. Incluso le copió el nombre, debió de ser una sugerencia de los taimados consejeros, porque el recuerdo del papa de la sonrisa Juan Pablo, era una buena carta de presentación. 
Como siempre el Opus Dei ayuda en el montaje de la escenografía, las apariencias, nos modernizamos, le damos un repaso a la fachada del papado haciéndolo parecer más integrado en los tiempos. Tomamos la melodía pero la letra de la canción es muy otra. 
Bajo esas apariencias funcionó la más despiadada de las inquisiciones en la iglesia católica. Al tiempo que se quitó de en medio  a obispos y teólogos de la liberación de América, se encubría a banqueros viejos y nuevos que utilizan el Vaticano y su excepcionalidad en materia de leyes como un lugar inmejorable para los buenos negocios. 
Desde la elección de Karol Wojtyla, se escribió mucho para tratar de entender la clase de hombre que era. La clase de hombre que tolera que gente como Villot, Cody, Marcinkus, De bonis, Poletti, etc. siguieran en actividad y gozaran de amplios poderes, no es posible erigir una defensa de Wojtyla basada en la presunta ignorancia, Marcinkus respondía de sus acciones directamente ante el Papa, y que éste desconociera el grado de culpabilidad delictiva que pesaba sobre Marcinkus escapa a toda duda razonable.
En el pasado se podía engañar fácilmente al pueblo, no había muchas formas de saber la verdad de las cosas. Pero hoy ocultar con beatificaciones exprés la historia es tratar a los creyentes católicos de ignorantes, manifestando muy poco aprecio hacia aquello que forma parte de lo  más íntimo, la fe. 


Me pregunto cuanta gente que sabe mucho mejor  lo que hay habrá  sido obligada a callar por la fuerza, por el miedo, por la coacción y la amenaza. Eso no es catolicismo ni fe. Es otra cosa. Y porqué siempre donde pisa el Opus Dei, se acallan todas las voces que saben, silencio sepulcral.


Más información detallada sobre los dos Juan Pablos: 


http://www.monografias.com/trabajos15/vaticano/vaticano2.shtml

Comentarios

Henares ha dicho que…
¿Cómo se puede poner en el camino de la santidad a alguien que se dedicó a tapar la pederastia de Marcial Maciel?
¿A alguien que antepone los intereses de sus amigos al sufrimiento de los niños?

No recuerdo si Juan Pablo II pidió perdón por tapar a Maciel ¿lo pidió?

Entradas populares de este blog

SEXO EN EL OPUS DEI, TEORÍA Y PRÁCTICA

Otra consulta memorable de Enrique Rojas, supernumerario del Opus Dei y psiquiatra de postín

LISTAS ATRASADAS DE MIEMBROS Y SIMPATIZANTES DEL OPUS Dei